En el apartado del día anterior hablé de las verdaderas intenciones de La gent del llamp. Desean aniquilar o eliminar a los escritores que no tienen amigos o padrinos que les ayuden a publicar sus libros. Por este motivo recurren a la coedición con muchos sacrificios, mientras ellos no tiene problemas porque sus editores (Aroal o Cosetània) aceptan pronto sus narraciones, poesías o teatro, sin pensarlo mucho. Recordemos que este grupo literario controla la colección de prosa en Cosetània mientrs que quien mada no se entera de nada. Es lo más lamentable. Solamente quieren quedar ellos. Me temo que lo conseguirán pues tienen en su apoyo a la prensa local, la radio local, la TV local y por supuesto los libreros. Cuando ven un libro de una editorial de coedición no lo ponen en el mostrador, lo ponen en el rincón más escondido de la librería, donde el cliente no lo ve o pasa de largo.
La prueba que tengo es un artículo publicado en Internet de radio.cat, la emisora local que siempre está con este colectivo y les ayuda a promocionarse . En un artíulo el impresentable escritor Joan Cavallé, fundador de La gent del llamp junto a Magí Sunyer, su querido y "cómplice" en sus relatos, como el mismo escribe, afirma con unas palabras dictatoriales que este colectivo es necesario para acabar con los escritores de autopublicación. Es decir, solamente deben quedar este colectivo y sus amigos como escritores magníficos en la Historia de la Literatura de Tarragona. Esta limpieza empezará pronto, si no ha comenzado.
La única ventaja que tenemos los coautores es que ellos son poderosos en Tarragona y alrededores. En el resto del país son desconocidos. Además no pueden imponer sus autores ni ideas al resto del país porque no tienen medios. Su manera de actuar se llama dictadura.
Por hoy hay bastante. En otro momento continuaré, aunque sea en solitario, esta protesta contra su política fascista.
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